La Hoguera
La Hoguera
La SHCP a través de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) -presuntamente, porque no notificaron-, congeló las 224 cuentas que tiene la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH) en un hecho sin precedentes por el cual, al menos 7 mil 500 trabajadores universitarios y jubilados, mas aquellos que perciben sus ingresos por honorarios, no contarán con el pago de sus actividades a partir de este momento y hasta que se destrabe el conflicto, por lo que la misma operatividad de la institución que tiene 61 mil estudiantes se ve comprometida.
La UIF ya había congelado cuentas del patronato universitario mientras realizaba investigaciones por presunto lavado de dinero por 156 millones de dólares; aunque la información era pública, las operaciones con banca de segundo piso no fueron bien vistas y se esperaba que entre la semana pasada y esta la medida precautoria diera marcha atrás.
Pero el conflicto político por la lucha del poder llegó a nuevos niveles que ahora afectarán directamente a miles de familias e incluso, ponene en riesgo la educación que reciben los estudiantes en las aulas, porque al corte de mes, no sólo los trabajadores estarán sin cobrar sino que vendrán los cortes en servicios básicos así como de telefonía, internet, etc.
¿Había razón para congelar la totalidad de cuentas?
No. Las medidas precautorias por presunto lavado de dinero afectan las cuentas cuya procedencia se desconoce, no así aquellas en las que la Federación deposita sus recursos directamente, pues estas son fiscalizadas y no “entra” dinero de otro lugar ni “sale” sin que pueda ser debidamente monitoreado.
En ese tenor si la preocupación era por algún tipo de desvío, simplemente las auditorías harían observaciones que ameritan investigaciones a los responsables que así correspondiera, siendo incluso “más fácil” hacerlo de dicha forma.
La medida de la UIF es grave y debe tener consecuencias, pues trasciende las pugnas políticas.
Por lo pronto, o el responsable de Hacienda está firmando su renuncia por adelantado, o lo que podría ser peor, está usando la medida para dar un manotazo y demostrar su poderío incluso por encima de la Ley.
Lo que es cierto es que la medida debe recular y en su caso, deben rodar cabezas… lo que no está claro es de qué lado caerán.