Los patrones de consumo de los mexicanos reflejan una mejora en la confianza en su bienestar financiero, según los últimos resultados de ConsumerSignals de Deloitte, una firma de consultoría.
Con el fin de comprender cómo las personas gestionan sus finanzas de manera diversa y a menudo inesperada en relación con los cambios económicos, la consultora ha desarrollado el Índice de Bienestar Financiero (FWBI, por sus siglas en inglés). Este índice aborda el bienestar financiero desde la perspectiva de la experiencia personal de los consumidores, con el propósito de comprender cómo toman decisiones y cuáles son sus patrones de compra.
El FWBI considera aspectos clave del comportamiento de los consumidores, como la capacidad para pagar deudas, la comodidad con el ahorro y las expectativas de crecimiento. A partir de esto, se generan una serie de métricas y una puntuación que permite medir el bienestar financiero a nivel global y local. Los resultados se presentan en la edición anual del ConsumerSignals.
En los resultados más recientes, correspondientes a diciembre de 2023, el puntaje global fue de 102.8, lo que señala un aumento en el bienestar financiero a nivel mundial al obtener las calificaciones más altas del año. El índice de bienestar financiero de los mexicanos pasó de 97.2 en 2022 a 105.2 en 2023, colocándonos por encima del promedio global.
El último trimestre de 2023 mostró una tendencia hacia la normalización en el bienestar financiero de los mexicanos. Durante esos meses, más del 50% de los encuestados manifestó disponer de recursos suficientes para alcanzar su estilo de vida ideal en cinco años, y un 55% se mostró optimista respecto a la mejora de sus finanzas personales en un año.
Además, el 50% de los encuestados expresó disposición para gastar en artículos que les proporcionen alegría, como alimentos y bebidas (31%), prendas de vestir y accesorios (22%), o cuidado personal (13%).
Entre noviembre y diciembre, se observó una disminución del 4% en el número de mexicanos preocupados por sus niveles de ahorro, pasando del 46% al 42%.
Para el próximo mes, se prevé que los consumidores continúen en una senda de estabilidad en sus finanzas, proyectando destinar alrededor del 16% de sus gastos en entretenimiento (viajes y actividades recreativas) y el 14% en alimentación, manteniendo las tendencias del último trimestre.
Estos indicadores reflejan una creciente confianza de los consumidores en la estabilidad económica, así como una consolidación continua de los patrones de consumo desde el inicio de la pandemia del Covid-19 en 2020.
Aunque el optimismo del consumidor mexicano se basa en percepciones sólidas sobre sus finanzas personales y confianza en la dirección de la economía, la preocupación por la inflación es alta (75%), superando la cifra mundial del 50%, con excepción de China, que registra un 40%.
Según los consumidores mexicanos, los servicios y productos con mayor probabilidad de aumentar sus precios son los restaurantes (69%), comida y bebida (68%), ropa y accesorios (65%), así como gasolina y otros servicios (62%).
Por último, las intenciones de ahorro e inversión han experimentado un aumento significativo, pasando del 0% al 24% entre diciembre de 2022 y diciembre de 2023, representando un porcentaje entre el 6% y el 7% de los ingresos de los encuestados.Con información de FORBES
