Gerardo Saade Murillo, sobrino del delegado en Hidalgo de la Cruz Roja José Saade Kuri, hijo de Gerardo Saade y a su vez nieto de Jesús Murillo Karam, se encuentra preso desde el pasado miércoles por ser el presunto autor intelectual del atentado que sufrió el abogado Sergio Beltrán Merino, exesposo de Carolina Viggiano y padre a su vez de Juan Pablo Beltrán Viggiano, diputado federal suplente de Marco Antonio Mendoza Bustamante, presidente interino del PRI en Hidalgo.
La causa penal es la 899/2021 y derivó del atentado sufrido por Beltrán merino afuera de su despacho en octubre de 2021, cuando recibió tres impactos de bala con el objeto de privarlo de su vida.
Saade Murillo tiene antecedentes de violencia como el revelado hace 8 años, cuando ingresó a la casa de su entonces pareja sentimental Alexia Ímax y allí la golpeó. Alexia es hija de Eugenio Ímaz Gispert, exfuncionario en Hidalgo que durante el gobierno de Enrique Peña Nieto fue nombrado titular del CISEN y allí permaneció hasta la renuncia de Miguel Ángel Osorio Chong a la Secretaría de Gobernación.
Una familia con todo tipo de señalamientos
El abuelo de Saade Murillo es Jesús Murillo Karam, exprocurador de la República recluido actualmente en un penal por haber torturado personas para crear la “verdad histórica” sobre los 43 desaparecidos de la escuela Isidro Burgos de Ayotzinapa, los cuales se presume que fueron ejecutados. Para imponer su narrativa habría torturado testigos junto con otros personajes que son buscados por la misma Interpol y donde destaca el también hidalguense Tomás Zerón de Lucio.
Aunado a lo anterior, Murillo Karam ha sido acusado de operar presuntos esquemas de desvío de recursos por miles de millones de pesos mediante empresas de varios de sus familiares cuando ostentaba el cargo de procurador con Peña Nieto.
El tío de Saade Murillo es José Saade Kuri, delegado de la Cruz Roja en Hidalgo quien ha sido señalado de diversas irregularidades en dicha institución además de vejaciones hacia los trabajadores.
Su padre, Gerardo Saade Kuri tiene una vida empresarial polémica. Es propietario, por ejemplo, de diversos inmuebles adquiridos poco después de que su suegro dejara la gubernatura de Hidalgo y algunos de los cuales son arrendados por el mismo gobierno de Hidalgo en la actualidad. Entre sus gasolinerías por ejemplo, las hay entre las exhibidas por ser las que más roban a los usuarios en todo el país.
Nieto, padre y abuelo han recurrido a amparos por diversas averiguaciones en su contra a lo largo de los años.